ZOONOSIS: Dos ejemplos de transmisión

     

    Como hemos estudiado, la zoonosis es una enfermedad o infección transmisible de manera natural entre los animales y las personas, directa o indirectamente. Los dos ejemplos que vamos a citar en este trabajo son los que corresponden a la fiebre Q y la toxoplasmosis.

La fiebre Q es causada por la bacteria Coxiella burnetii, que se encuentra comúnmente en ovejas, cabras y ganado bovino. Estos animales contagian la bacteria a través de la orina, las heces, la leche y productos del nacimiento, como la placenta y el líquido amniótico. Cuando estas sustancias se secan, las bacterias que contienen pasan a formar parte de las partículas en suspensión del corral. La infección generalmente se transmite la por vía de aerosol en la que los humanos, a través de los pulmones,  inhalan el polvo del corral contaminado. La fiebre Q puede ser aguda o crónica.

La forma aguda produce fiebre y a menudo afecta el aparato respiratorio, aunque a veces compromete al hígado. Las mujeres infectadas durante el embarazo tienen un mayor riesgo de aborto espontáneo y parto pretérmino. El período de incubación oscila entre 18 y 21 días. Suele ser asintomática aunque en determinados  pacientes comienza de forma súbita con síntomas similares a la gripe: fiebre, cefalea intensa, escalofríos, malestar general grave, mialgia, anorexia y sudoración pudiendo persistir entre 1 y  3 semanas. Los síntomas respiratorios son tos seca no productiva y dolor torácico pleurítico que aparecen entre 4 y 5 días después del inicio de la enfermedad. Estos síntomas pueden ser más graves en ancianos o en pacientes debilitados.  La forma crónica ocurre en menos del 5% de los pacientes y puede manifestarse desde unas pocas semanas hasta muchos años después de la infección inicial. Suele manifestarse con endocarditis o hepatitis pudiendo desarrollarse osteomielitis. Para la fiebre Q existe vacuna que en la actualidad está comercializada en Australia.

La toxoplasmosis es una enfermedad transmitida por vía oral causada por el parásito Toxoplasma gondii. Este protozoo se reproduce en el gato, quien constituye su huésped definitivo. La infección se produce consumiendo ooquistes liberados con las heces o bien al ingerir carne contaminada. La mayor parte de las personas infectadas es asintomática, aunque el parásito puede causar serios problemas en personas con sistemas inmunitarios debilitados y bebés de madres que contrajeron la infección durante el embarazo. Si la embarazada contrae la toxoplasmosis en los inicios del embarazo puede sufrir un aborto o a una muerte fetal.

Esquema de transmisión de Toxoplasma gondii

Los problemas pueden incluir lesiones en el cerebro, los ojos y otros órganos. Los síntomas de la infección aguda suelen ser de corta duración y autolimitados como una gripe o mononucleosis: dolor de cabeza, dolores musculares, inflamación de los ganglios linfáticos, pudiendo presentar incluso inflamación del hígado y del bazo. En el caso de la infección crónica la mayoría de los casos se presenta con quistes en los tejidos aunque la persona pueda no tener manifestaciones clínicas.